Inversor vende acciones de Tesla: ¿El futuro de la compañía está en juego?

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Ross Gerber, un inversor de larga data en Tesla, ha vendido la mitad de sus acciones, expresando dudas sobre el futuro de la compañía bajo la dirección de Elon Musk. Gerber cuestiona el interés del público en los productos de Tesla, incluyendo los vehículos eléctricos y robots humanoides, y critica el liderazgo de Musk.

Inversor vende acciones de Tesla: ¿El futuro de la compañía está en juego?

Tesla, una empresa valorada en US$700,000 millones y liderada por el hombre más rico del mundo, enfrenta un momento crucial. Ross Gerber, un inversor de larga data en Tesla y CEO del fondo de inversión Gerber Kawasaki Wealth and Investment Management, ha decidido vender la mitad de sus acciones, equivalentes a US$60 millones, debido a sus dudas sobre el futuro de la compañía bajo la dirección de Elon Musk.

Gerber, uno de los inversores más antiguos de Tesla, argumenta que el público no parece muy interesado en comprar sus automóviles eléctricos y autónomos, ni sus robots humanoides. Además, expresa su preocupación por el desarrollo de la inteligencia artificial, la cual considera no será suficiente para salvar a la empresa.

Su pesimismo se centra principalmente en la figura de Elon Musk, a quien critica desde que adquirió Twitter en 2022. Si bien reconoce la calidad de los productos de Tesla, considera que el CEO no está realmente comprometido con la empresa: “Tienen los mejores productos de la industria pero un CEO que en realidad no trabaja allí, que no intenta vender autos”.

Gerber, a pesar de sus dudas, aún conserva una participación de US$50 millones en Tesla, mientras la empresa navega en el mercado de valores con altibajos. El precio de las acciones rondaba los US$210 al 27 de agosto, en medio de una competencia cada vez más fuerte con los fabricantes chinos.

¿Robots y inteligencia artificial: una apuesta arriesgada?

Tesla ha invertido fuertemente en la robótica y la inteligencia artificial, pero Gerber no confía en su éxito en este mercado, una vez más, debido a Musk. “La forma más sencilla de comprobarlo es preguntarle a tus vecinos: ‘¿Cuántos de ustedes comprarían un robot humanoide construido por Elon Musk?’. Y la respuesta es cero. Nadie quiere un robot de Elon Musk. ¿Por qué? ¿Quién confiaría en él?”, cuestiona el inversor.

“Lo último que necesito es un robot construido por Elon Musk en mi casa, así que no sé si todavía piensan comercializar eso”, agrega, dejando en evidencia su falta de confianza en la visión de Musk.

La decisión de Gerber de deshacerse de una parte importante de sus acciones de Tesla es un claro indicativo de las dudas que existen sobre el futuro de la compañía bajo el liderazgo de Musk. El tiempo dirá si su visión es acertada o si Tesla logrará superar los desafíos que enfrenta.

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