En la reciente final de la competencia, se vivió un enfrentamiento lleno de tensiones entre las dos finalistas. Mientras una de ellas era una reconocida modelo, la otra se destacaba por su talento y dedicación en la disciplina. La controversia surgió cuando los televidentes vieron cómo la modelo utilizaba estrategias poco éticas para desestabilizar a su contrincante. El público, que había seguido de cerca el desarrollo del programa, no ocultó su descontento ante este comportamiento. Muchos expresaron en redes sociales su deseo de que la otra finalista se alzara con el primer puesto, argumentando que la modelo ya contaba con suficiente reconocimiento en el mundo de la moda y no necesitaba ganar esta competencia. Sin embargo, a pesar de las críticas y las polémicas, la modelo logró adjudicarse el primer lugar, lo que dejó con un sinsabor a una parte de los televidentes. Algunos consideraron que esta decisión no fue justa y que se debió tener en cuenta el talento y la dedicación de su contrincante. Las reacciones ante este resultado no se hicieron esperar. Algunos televidentes manifestaron su disgusto por las acciones de la modelo y la falta de imparcialidad del jurado. Otros, por su parte, defendieron la elección argumentando que la belleza y la actitud son aspectos igualmente importantes en una competencia de esta índole. Este enfrentamiento entre las finalistas ha generado un amplio debate en redes sociales y en los círculos de aficionados al programa. Algunos consideran que el programa debe reformular su dinámica y establecer criterios más claros para evaluar a los competidores. Otros creen que estas polémicas son parte del show y que es inevitable que se generen controversias. En conclusión, el enfrentamiento entre las dos mujeres en la final de la competencia ha dejado un sinsabor en varios televidentes. La decisión de que la modelo se alzara con el primer puesto generó críticas y controversia, evidenciando la necesidad de una discusión sobre los criterios de evaluación en este tipo de competencias. Es importante recordar la importancia de una crítica constructiva, que permita mejorar las dinámicas y la transparencia en estos programas televisivos.