Santiago Peña asumió la Presidencia de Paraguay con la promesa de revitalizar la economía, fortalecer la integración regional y combatir la corrupción. Destacó la soberanía en acuerdos comerciales y se comprometió a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Su enfoque es un Paraguay más próspero y comprometido en la región. El nuevo Presidente de Paraguay, Santiago Peña, ha asumido el cargo con una visión clara para el futuro del país. Durante su discurso de inauguración, Peña resaltó la importancia de revitalizar la economía paraguaya, fortalecer la integración regional y combatir la corrupción en todos los niveles de gobierno. Peña enfatizó la importancia de la soberanía en los acuerdos comerciales, asegurando que Paraguay deberá buscar su propio beneficio y no someterse a imposiciones externas. Además, se comprometió a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, priorizando la educación, la salud y el acceso a servicios básicos. El nuevo Presidente está decidido a posicionar a Paraguay como un país próspero y comprometido en la región. Para lograr esto, se centrará en promover la inversión extranjera, impulsar la creación de empleo y fomentar el desarrollo de sectores clave de la economía. La lucha contra la corrupción es otro de los pilares de su mandato. Peña ha prometido implementar medidas y políticas que garanticen la transparencia y la rendición de cuentas en la gestión pública. Asimismo, se comprometió a fortalecer los órganos de control y a perseguir y sancionar a aquellos que cometan actos de corrupción. En resumen, Santiago Peña llega a la Presidencia de Paraguay con una agenda clara y ambiciosa. Su enfoque en revitalizar la economía, fortalecer la integración regional y combatir la corrupción muestra su compromiso con un Paraguay más próspero y comprometido en la región. Los ciudadanos esperan con optimismo los cambios y mejoras que este nuevo Gobierno pueda proporcionar.