El Partido Popular (PP) ha dejado claro que no aceptará ninguna demanda o exigencia por parte de los grupos independentistas que se encuentre fuera de lo establecido por la constitución española. Esta postura fue comunicada después de manifestar su disposición a reunirse con los representantes de estos grupos en el Congreso. El PP, partido político en el gobierno de España, ha señalado que cualquier diálogo o negociación se debe enmarcar dentro de los límites legales, respetando los principios y valores que se establecen en la constitución del país. Además, ha dejado claro que dichas reuniones se llevarán a cabo en el Congreso, como sede de la representación política, y no con el ex presidente catalán Carles Puigdemont, quien se encuentra actualmente en Bélgica y tiene diversas causas judiciales pendientes en España. El mensaje del PP es contundente y busca mostrar su compromiso con la legalidad y la unidad de España. En los últimos años, el conflicto entre el gobierno central y los líderes independentistas de Cataluña ha generado tensiones y polarización en la sociedad española, así como una ruptura en la convivencia política y social. El PP considera que es necesario avanzar en un diálogo constructivo y en la búsqueda de soluciones dentro del marco constitucional, pero rechaza cualquier propuesta que vulnere los principios fundamentales de la legalidad española. En este sentido, insiste en que las demandas independentistas deben ser planteadas y debatidas dentro de los cauces democráticos y legales establecidos. Esta postura del Partido Popular se enmarca en una estrategia de reafirmación de su posición política y de defensa de la unidad de España. La formación política defiende que cualquier negociación debe partir del respeto a la legalidad vigente y busca transmitir un mensaje claro a la sociedad española, rechazando cualquier intento de secesión o ruptura territorial. Asimismo, el PP busca marcar distancia con el ex presidente catalán, Carles Puigdemont, quien lideró el intento de declaración de independencia de Cataluña en 2017. La formación política considera que Puigdemont está fuera de la legalidad y no representa la postura legítima de los catalanes. En conclusión, el Partido Popular rechaza las demandas independentistas que estén fuera del marco constitucional y se muestra dispuesto a reunirse con los representantes de estos grupos en el Congreso. Su objetivo es avanzar en un diálogo constructivo y en la búsqueda de soluciones dentro de los límites legales, rechazando cualquier intento de secesión o ruptura territorial.