En las últimas semanas, una frase pronunciada por la candidata presidencial de Juntos por el Cambio ha generado una fuerte conmoción en las filas del PRO. Esta declaración ha revelado la necesidad de autonomía de la postulante, quien busca desmarcarse de la influencia de su partido político. A su vez, se ha manifestado malestar por los coqueteos del ex presidente Macri con el economista Javier Milei. La frase en cuestión ha sido interpretada como un quiebre en la línea política del PRO y como un llamado a la independencia por parte de la candidata presidencial. Esto ha generado preocupación entre algunos miembros del partido, quienes ven en esta declaración un desafío a la autoridad del liderazgo central. Por otro lado, los coqueteos de Macri con Milei han generado malestar entre los militantes del PRO. Esta relación ha sido vista por algunos como una traición a los principios y valores del partido, ya que Milei representa una postura política radicalmente diferente a la del PRO. En este contexto, la candidata presidencial se encuentra en una posición difícil. Por un lado, busca mantener la independencia y autonomía de su candidatura, pero por otro, debe lidiar con las tensiones internas del partido y los coqueteos de su ex presidente con un político de ideología opuesta. La incertidumbre y el malestar reinante en las filas del PRO evidencian la necesidad de un debate interno en el partido sobre la dirección a seguir. La candidata presidencial deberá buscar un equilibrio entre la independencia que reclama y la unidad partidaria que se espera de ella. En conclusión, las declaraciones de la candidata presidencial de Juntos por el Cambio han generado conmoción en el PRO y han revelado la necesidad de autonomía de la postulante. A su vez, los coqueteos del ex presidente Macri con Javier Milei han causado malestar en el partido. Este escenario evidencia la necesidad de un debate interno y un equilibrio entre la independencia y la unidad partidaria.