En la madrugada de hoy, alrededor de las 00.50 horas, la propietaria de un complejo de apartamentos ubicado en calle Perito Moreno de la ciudad de Oberá, se vio en la necesidad de llamar al servicio de emergencias 911 debido a la presencia de disturbios e incidentes familiares en el lugar. La situación se presentó de manera sorpresiva y la propietaria decidió actuar rápidamente para evitar que se intensificaran los problemas y pudieran afectar la seguridad de los residentes. Por esta razón, recurrió a la intervención policial para controlar la situación y restablecer el orden en el complejo de apartamentos. Las fuerzas de seguridad llegaron al lugar en pocos minutos y se encargaron de mediar en el conflicto. La propietaria explicó a los agentes lo que estaba sucediendo y les proporcionó detalles sobre los individuos involucrados en los disturbios e incidentes familiares. Gracias a la rápida respuesta de la policía, los altercados lograron ser controlados y se evitó que la situación se agravara. Los agentes presentes en el lugar tomaron las medidas necesarias para calmar los ánimos y garantizar la seguridad de los residentes. Además, se llevó a cabo un relevamiento del complejo de apartamentos para identificar posibles daños y documentar pruebas relacionadas con los disturbios. Esto permitirá llevar adelante las correspondientes investigaciones y tomar acciones legales si es necesario. La propietaria del complejo de apartamentos agradeció la pronta respuesta de la policía y destacó su profesionalismo y dedicación para resolver el conflicto de manera pacífica. Asimismo, expresó su compromiso de mantener la seguridad y tranquilidad en el lugar, adoptando las medidas necesarias para prevenir situaciones similares en el futuro. Este incidente pone de manifiesto la importancia de contar con una fuerza policial presente y preparada para actuar en cualquier situación de emergencia. A su vez, destaca la relevancia de mantener una buena convivencia entre los residentes de los complejos de apartamentos para evitar conflictos que puedan poner en peligro la seguridad y bienestar de todos. En conclusión, gracias a la intervención policial oportuna, los disturbios e incidentes familiares en el complejo de apartamentos de Oberá pudieron ser controlados y se trabajará para evitar que vuelva a suceder. La comunidad y las autoridades locales deben colaborar para mantener la seguridad en estos espacios compartidos y promover la convivencia pacífica entre los residentes.