La norma que debía entrar en vigencia el 1° de septiembre y que obligaba a Mercado Pago a abrir su red de comercios a otras billeteras, ha sido pospuesta debido a dificultades técnicas. El sector ya había anticipado que la puesta en marcha en el plazo original no era factible. El nuevo esquema, que busca fomentar la competencia y la inclusión financiera, requerirá que Mercado Pago permita a otras billeteras electrónicas operar en su red de comercios. Esta medida busca impulsar la diversificación del mercado y brindar a los usuarios más opciones a la hora de realizar pagos digitales. Sin embargo, la implementación de esta norma ha sido retrasada debido a problemas técnicos. A pesar de los esfuerzos de Mercado Pago por cumplir con los requisitos establecidos, la compañía afirma que necesita más tiempo para adaptarse a las nuevas regulaciones. La apertura de la red de comercios de Mercado Pago a otras billeteras es vista como una oportunidad de crecimiento para el sector de las fintech y una medida que mejorará la competencia en el mercado de pagos digitales. Sin embargo, también ha generado cierta preocupación entre algunos comerciantes, quienes temen un aumento en la complejidad de los procesos y posibles problemas de interoperabilidad entre las diferentes billeteras electrónicas. A pesar del retraso en la entrada en vigencia de la norma, se espera que en los próximos meses se implemente un plan piloto para probar la interoperabilidad entre diferentes billeteras electrónicas. Esto permitirá evaluar su funcionamiento y realizar los ajustes necesarios antes de una implementación a gran escala. En resumen, la entrada en vigencia de la norma que obliga a Mercado Pago a abrir su red de comercios a otras billeteras ha sido pospuesta debido a dificultades técnicas. Aunque esta medida busca fomentar la competencia y la inclusión financiera, es necesario realizar ajustes y pruebas para garantizar un funcionamiento adecuado de la interoperabilidad entre las diferentes billeteras electrónicas.