El ministro de Seguridad ha salido al paso de las acusaciones vertidas por la portavoz presidencial contra Javier Milei, asegurando que no cuenta con elementos suficientes para inculpar al reconocido economista por los hechos violentos que han tenido lugar en los últimos días. En declaraciones a los medios, el funcionario destacó la importancia de no realizar acusaciones infundadas y de respetar el principio de presunción de inocencia. Si bien no se puede eximir a Milei de sus posturas polémicas y radicales, el ministro reafirmó que no hay indicios concretos que lo vinculen directamente con los ataques a supermercados y otros incidentes violentos. Sin embargo, señaló que estos actos no son fruto de la espontaneidad. Es importante destacar que los ataques a supermercados han provocado caos y desabastecimiento en la ciudad en los últimos días. Varios establecimientos fueron saqueados y vandalizados, generando preocupación e indignación en la población. Ante esta situación, el ministro de Seguridad reiteró el compromiso del gobierno para brindar seguridad a los ciudadanos y garantizar el orden público. Si bien aún se desconoce la motivación detrás de estos actos de violencia, el ministro enfatizó la necesidad de llevar a cabo una investigación exhaustiva para identificar a los responsables y determinar las eventuales conexiones con grupos o individuos involucrados en la promoción de la violencia. Es importante recordar que la violencia no es el camino para expresar descontento o protestar por situaciones adversas. El diálogo y el respeto son fundamentales para resolver conflictos y construir una sociedad más justa y equitativa. El gobierno se encuentra trabajando junto a las fuerzas de seguridad para restablecer la calma y asegurar el bienestar de la población. En conclusión, el ministro de Seguridad ha desestimado las acusaciones contra Javier Milei por los hechos violentos de los últimos días, aunque reconoce que los ataques a supermercados no son espontáneos. La situación actual requiere una respuesta conjunta de la sociedad y el gobierno para garantizar la paz y el orden en la ciudad.