La historia de amor de Ben Affleck y Jennifer Lopez, también conocida como "Bennifer", ha tenido muchos giros y vueltas. Su reciente divorcio ha agregado otro capítulo dramático a su saga, esta vez centrado en la venta de su mansión de 68 millones de dólares en Los Ángeles. La propiedad, adquirida en 2023, ha estado en el mercado desde julio de 2024 sin éxito alguno, llevando a una disputa entre la ex pareja sobre el precio de venta. Según fuentes de TMZ y Us Weekly, Ben Affleck está ansioso por deshacerse de la propiedad y quiere rebajar el precio para acelerar la venta. Sin embargo, Jennifer Lopez se resiste, creyendo que la casa puede obtener un precio más alto. Varias agencias inmobiliarias han confirmado que el precio inicial es demasiado elevado para el mercado actual y recomiendan una rebaja del 15% para atraer compradores. La situación se complica por el hecho de que la mansión ya fue considerada sobrevalorada en el momento de su compra. Esta discrepancia entre Ben y Jen refleja no solo un desacuerdo financiero, sino también una posible diferencia de opiniones sobre el apego sentimental a la propiedad. Mientras Ben busca cerrar este capítulo de su vida, Jennifer parece más reticente a aceptar una pérdida financiera. A pesar de esta tensión relacionada con la venta de la casa, las fuentes indican que Ben y Jen mantienen una relación cordial y respetuosa fuera de este asunto. De hecho, Ben ha expresado públicamente su admiración por Jennifer y su excelente relación con sus hijos, desmintiendo los rumores de una ruptura amarga. Su enfoque en la crianza conjunta de sus hijos sugiere que, a pesar de los conflictos comerciales, la ex pareja prioriza el bienestar familiar. Este conflicto inmobiliario destaca la complejidad de las separaciones, incluso para las celebridades más ricas y famosas. La mansión de 68 millones de dólares se ha convertido en un símbolo de los desafíos que enfrentan incluso las parejas más exitosas al intentar desmantelar su vida compartida después de una ruptura. El tiempo dirá si Bennifer logra resolver sus diferencias y vender la propiedad, o si la mansión seguirá siendo un punto de contención en su ya compleja historia.