El pasado 29 de noviembre de 2024, la pantalla de TN fue testigo de un momento profundamente emotivo: la despedida de Sergio Lapegüe, tras 34 años ininterrumpidos en el canal. Su salida, lejos de ser una simple renuncia, se convirtió en un evento televisivo que conmovió a la audiencia y a sus compañeros. Lapegüe, conocido por su estilo único que mezcla información con entretenimiento, no pudo contener las lágrimas al despedirse del espacio que lo vio crecer profesional y personalmente. La emisión de "Tempraneros", su programa matutino, se convirtió en una retrospectiva de su trayectoria. Junto a su compañera Roxy Vázquez, quien también se emocionó profundamente, Lapegüe repasó sus inicios, sus coberturas más importantes (incluyendo eventos trascendentales como el atentado a la AMIA y la crisis del 2001), y los momentos más divertidos que compartieron con la audiencia a lo largo de las décadas. Las imágenes nostálgicas proyectadas en pantalla acompañaron las palabras de agradecimiento del conductor, quien reconoció la importancia de su equipo y la fidelidad de los televidentes. Lapegüe, quien ingresó a TN siendo un joven soltero, construyó allí una vida: se casó, tuvo hijos y ahora disfruta del "nido vacío". En su emotivo discurso, agradeció a las autoridades del canal, a sus compañeros ("sin ustedes no soy nada"), y especialmente a la audiencia que lo acompañó durante tantos años. Sus palabras fueron sinceras y conmovedoras, reflejando la profunda conexión que forjó con el público y sus colegas. Su despedida estuvo cargada de simbolismo. La frase escrita en el área de maquillaje, "Me voy a bajar del pony, voy a caminar en el llano como cuando entré y voy a buscar otros sueños", resumió perfectamente su decisión. Lapegüe cierra un capítulo importante de su vida, pero no para detenerse. Busca nuevos desafíos, nuevos horizontes, con la misma pasión y entrega que lo caracterizaron en TN. El final, con un abrazo colectivo y el sonido de "Suspicious Minds", el himno de Elvis Presley, una figura icónica para Lapegüe, fue un broche de oro a una historia de éxito televisivo que quedará grabada en la memoria de muchos. El futuro de Lapegüe parece prometedor. Aunque su partida de TN fue conmovedora, también se trata de un nuevo comienzo. Su experiencia y carisma lo llevarán a nuevos proyectos, y sus seguidores esperan con ansias lo que se viene en su carrera. La despedida de Sergio Lapegüe no fue solo un adiós a un conductor; fue un reconocimiento a una trayectoria impecable, a una persona que se entregó por completo a su trabajo y que construyó una relación auténtica con su audiencia. Su legado en TN permanecerá por siempre, y su próximo capítulo promete ser igual de emocionante.