La Inspección General de Justicia (IGJ) ha suspendido la reelección anticipada de Claudio "Chiqui" Tapia como presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), intensificando la lucha entre el gobierno de Javier Milei y la institución deportiva. El gobierno, a través de la IGJ, ha invalidado las elecciones y los cambios estatutarios previstos para la Asamblea General Ordinaria de la AFA, programada para el 17 de octubre.
La decisión se basa en una impugnación presentada por el club Talleres de Córdoba, que argumentó que Tapia no dio tiempo suficiente para la formación de otras listas o campañas electorales. Sin embargo, la disputa subyacente radica en la oposición de Tapia a las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD), un modelo que el gobierno de Milei promueve para permitir la entrada de capital privado a los clubes.
El gobierno considera que las SAD podrían revitalizar la economía del fútbol argentino, mientras que Tapia, respaldado por los logros de la selección nacional, se opone al modelo, argumentando que podría desmantelar la estructura tradicional del fútbol argentino. Esta disputa se ha intensificado con el anuncio del primer mega DNU del gobierno, el 70/2023, que busca facilitar la creación de SAD.
La decisión de la IGJ ha generado un fuerte debate, con Tapia anunciando que la resolución no lo afecta y que continuará con sus planes de reelección. La IGJ ha enviado veedores a la reunión de clubes del 17 de octubre, mientras que Tapia busca amparo judicial para defender su postura. El gobierno, por su parte, considera que la decisión de la IGJ es válida y que Tapia debería acatarla.
Este enfrentamiento entre el gobierno y la AFA ha generado un clima de incertidumbre en el fútbol argentino. Se espera que la situación se resuelva en los próximos días, con la posibilidad de que la disputa llegue a los tribunales.