Día Mundial de la Salud Mental: Claves para una Jornada de Concientización

El 10 de octubre de cada año, celebramos el Día Mundial de la Salud Mental, una jornada dedicada a concientizar sobre la importancia del bienestar emocional, psíquico y social de las personas. Este día nos recuerda que la salud mental es un pilar fundamental para una vida plena y que todos tenemos un rol crucial en la promoción de su cuidado.

Origen y Objetivos

La iniciativa del Día Mundial de la Salud Mental surgió en 1992 por iniciativa de la Federación Mundial para la Salud Mental (WFMH). Richard C. Hunter, subsecretario general de la WFMH, impulsó esta fecha con el objetivo de generar conciencia a nivel global sobre las agendas críticas de salud mental.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) se unió a esta celebración, definiendo la salud mental como "el estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades." La OMS subraya la importancia de promover acciones que cuiden la salud mental y atiendan las necesidades de las personas, considerando que este cuidado es esencial para la prevención del suicidio y la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.

Salud Mental en el Trabajo: Un Tema Crucial

En 2024, la OMS ha centrado la temática del Día Mundial de la Salud Mental en "la salud mental en el trabajo". Esta iniciativa destaca la estrecha relación entre el entorno laboral y el bienestar emocional de las personas. Condiciones laborales poco saludables, discriminación, exposición a riesgos, acoso y precarización laboral pueden afectar significativamente la salud mental de los trabajadores. La OMS identifica nueve claves para comprender la relación entre la salud mental y el trabajo:

El trabajo impacta la salud mental y viceversa: Un ambiente laboral positivo contribuye a la estabilidad y al logro de objetivos personales, mientras que un entorno laboral negativo puede llevar a la falta de productividad y satisfacción profesional.
Los trabajadores están expuestos a riesgos para su salud mental: La discriminación, la inseguridad laboral, los bajos salarios y los daños psicológicos son factores que afectan negativamente la salud mental.
Consecuencias para la persona y su entorno: Los problemas de salud mental sin tratamiento adecuado pueden generar dificultades en el desarrollo profesional, afectando no solo al trabajador, sino también a su familia y entorno cercano.
Repercusiones en el trabajo y la sociedad: La ansiedad y la depresión son problemas que pueden provocar la pérdida de millones de días de trabajo al año, generando un impacto significativo en la economía y la productividad.
La estigmatización dificulta la búsqueda de ayuda: La falta de comprensión y apoyo por parte de los empleadores puede generar estigmatización y miedo a solicitar ayuda.
Ayudar a los trabajadores a desarrollar su potencial: Es fundamental que las empresas implementen programas que acompañen a sus empleados, asegurando su bienestar y fomentando la productividad desde una perspectiva saludable y flexible.
Capacitar a los líderes para promover la salud mental: La capacitación de directivos, gerentes y jefes es crucial para prevenir un ambiente laboral tóxico y estresante.
Acción conjunta de las autoridades y empresas: Los gobiernos y las entidades públicas deben trabajar en conjunto con las empresas para crear campañas de concientización, sistemas de salud óptimos para tratar los problemas de salud mental y promover espacios de trabajo inclusivos.
Cuidar la salud mental individual: Es responsabilidad de cada individuo trabajar en su propio bienestar emocional. Buscar apoyo profesional, recurrir a técnicas de manejo del estrés y construir redes de apoyo son herramientas clave para cuidar la salud mental.

Conclusión

El Día Mundial de la Salud Mental nos invita a reflexionar sobre la importancia de promover el bienestar mental en todos los ámbitos de la vida. Es un día para recordar que la salud mental es fundamental para una vida plena y que todos tenemos un rol en su cuidado. Desde la creación de ambientes laborales saludables hasta el desarrollo de estrategias de autocuidado personal, cada acción que favorezca el bienestar mental contribuye a construir una sociedad más justa y compasiva.