El Festival Internacional de Cine de Entre Ríos se ha consolidado como uno de los eventos cinematográficos más importantes de la región. En su última edición, el director artístico del festival, en entrevista con Infobae Cultura, resaltó la necesidad de crear nuevas pantallas para el cine, adaptándose a las nuevas formas de consumo audiovisual y acercándose cada vez más a los espectadores. El cine contemporáneo ha experimentado importantes cambios en los últimos años, principalmente impulsados por la aparición de plataformas de streaming y la facilidad de acceso a través de dispositivos móviles. Ante este panorama, el Festival de Cine de Entre Ríos ha buscado adaptarse a estas nuevas dinámicas, promoviendo la exhibición de películas en formatos alternativos y proponiendo espacios de proyección más allá de las tradicionales salas de cine. En este sentido, el director artístico destaca la importancia de generar nuevos espacios para el cine, aprovechando las diferentes posibilidades tecnológicas que existen en la actualidad. El objetivo es acercar las películas a un público más amplio, incluso a aquellos que no suelen frecuentar las salas de cine. Para esto, se han realizado proyecciones al aire libre en parques y plazas, así como también se han impulsado ciclos de cine itinerantes en diversas localidades de la provincia. Además, el festival busca fomentar el trabajo en comunidad, estableciendo vínculos entre los diferentes actores de la industria audiovisual. Se promueve la colaboración entre directores, productores, distribuidores y exhibidores, generando un ambiente propicio para el intercambio de ideas y el desarrollo de proyectos conjuntos. De esta manera, se pretende fortalecer el sector cinematográfico local y fomentar la creación de contenidos de calidad. El Festival Internacional de Cine de Entre Ríos ha logrado posicionarse como un referente en la industria audiovisual, no solo por la calidad de las películas que se exhiben, sino también por su compromiso con la diversidad y la inclusión. Además de películas de reconocidos directores internacionales, el festival también ha impulsado la exhibición de producciones locales, brindando visibilidad a directores emergentes y a temáticas poco exploradas en la cinematografía tradicional. En conclusión, el Festival Internacional de Cine de Entre Ríos demuestra la importancia de adaptarse a los cambios en la industria audiovisual y de buscar nuevas formas de llegar al público. El cine ya no se limita a las salas de cine, sino que se ha abierto a diferentes pantallas y formatos. Festivales como este son fundamentales para promover el cine como arte y como medio de expresión, generando espacios de encuentro y diálogo entre los diversos actores de la industria.